Peor fue el remedio que la enfermedad. Nuestra emblemática matadora, Natalia Málaga, célebre por su siempre irreverente vocabulario, esta vez sí que la malogró toda.
Prácticamente insultó y humilló a una madre de familia víctima de los huaicos por haber concebido cuatro hijos, aconsejándola a viva voz que se “cosa” su parte íntima. Y como tiro de gracia le dijo que se lamenta haberle regalado un colchón.
“Ojalá que con ese colchón no tenga más hijos, le hubiera dado los productos de necesidad mejor para 4”, dijo la ex voleibolista.
Estas desafortunadas frases las emitió por un video que data del 2017, en el que aparece brindando ayuda para las personas afectadas por el Huaico, entre ellas, un grupo de madres de familia de escasos recursos.
Doña Natalia, ¿quién se cree usted para humillar de esta manera a las madres peruanas? No es justo tamaña precariedad de sus palabras malolientes.
La mujer no solo peruana debe ser respetada en toda su extensión.
Usted siempre fue una voz representativa de la mujer luchadora en el Perú. Fue designada como Embajadora de la Marca Perú por sus reiteradas campañas contra la violencia hacia la mujer. En fin.