La palabra influencer está de moda. Y no es para menos, ya que esta figura está revolucionando los esquemas tradicionales del marketing. Su capacidad de credibilidad convence hasta tal punto de que todo aquello que diga, opine o haga inmediatamente será adoptado por muchas personas.
El problema estriba cuando un Influencer utiliza los perfiles de Instagram diferentes al suyo.
Este es el caso de la hasta hace poco célebre Inluencer Ximena Moral quien copiaba fotos y mensajes posteadas en otros perfiles.
Es decir, toda una clonadora del talento otras pero verdaderas Influencers.
Ximena Moral se copiaba absolutamente todo, las poses, los captions, etc. Como diría mi estimado Acuña “no es plagio, es copia”