Todo empezó como jugando. Durante la emisión en vivo del Noticiero AMÉRICA, René Gastelumendi quiso dejar mal parada a su colega Mávila Huertas pidiéndole que no se acerque y mantenga su distancia.
Ella asimiló el golpe y reaccionó de inmediato y su respuesta lo dejó sordo, mudo y paralítico. Realmente no se lo esperaba.
Mávila le espetó frente a pantallas: “No me acerco nunca, menos me voy a acercar ahora”. Suficiente. René quedó perplejo sin atinar a decir algo. Cual noble can con el rabo entre las piernas no se dio por enterado y el mundo siguió andando. ¡Buenazaaaa Mávila!